Luis Alberto Garcia y Jorge Dalton -sigo a ambos en las redes- han colocado en sus muros su malestar por la actualidad de LA MODERNA POESÍA, diré lo que pienso:
Lezama me hizo un fan de esta librería cuando yo estaba en formación cultural y adolescencia, y su estilo art decó terminó por terminar de enamorarme pero seamos honestos. Los mejores libros que leí en Cuba me los mandaban del extranjero, y al propio Lezama durante años no lo vendieron allí, (tuve que leer a Lezama en la Biblioteca Nacional de Cuba) pues estaban prohibidos en Cuba, los libros que toda mi generación quiso leer.
Esa librería tenía dentro toda la bazofia socialista (eso si clásicos de todos los colores pero nunca Cabrera Infante, ni Severo Sarduy ni Vargas Llosa ni Milán Kundera, lo que hoy se ve en esa foto por fuera esa mierda, es la mierda que dejaba leer la dictadura con su censura. Si la vuelve a rehabilitar pondrán esa porquería exterior en el interior pero en forma de libro y cultura para adoctrinar.
No tengo nostalgia por ella hoy es más real y metáfora de un gobierno.
Me duele mucho más a mí que escribo libros los cientos de cubanos que no pueden leer ni comprar mis libros en Cuba y me lo confiesan como LOS ACUARTELADOS DE SAN ISIDRO, Historia del Malecón habanero o El Arte del Sabor.
Yo, Wendy Guerra, Jacobo Machover, Zoé Valdés, Armando Añel, Jorge Enrique Rodríguez, Armando Valdés Zamora, Cabrera Infante, Arenas, mi Amigo Enrisco en New York y otros cientos de escritores escribimos conscientes de que nunca nuestros libros estarán en librerías en Cuba y eso es lamentable solo por culpa de la dictadura cubana.
Por suerte Cuba no es ya el único lugar de cubanos , el mundo está pleno de Cubanos que si me compran y leen a través de Amazon y esos también son Cubanos.
Desde que triunfó la dictadura en 1959 dejó de ser la Moderna Poesía y pasó a ser la Moderna Porquería, de cerdos y puercos que intentaron adoctrinarnos en una granja. Por suerte no lo lograron y este año MSI 27N UNPACU y 11J demostraron REBELIÓN EN LA GRANJA, libro de George Orwell que no venderán allí tampoco.
Feliz Navidad. Arsenio Rodríguez Quintana.
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